jueves, 18 de junio de 2009

NUESTRA SEÑORA DE LA CONSOLACIÓN DE SUMAMPA

Hola militantes, Ya que los Aspis, este sabado van a salir a misionar junto a los juveniles contando la historia de la Virgen de Sumampa, me parecio prudente poner un poco( bastante) de info.


Fuente: http://www.obispadosgo.org.ar/Prensa/sumampa/index.htm


NUESTRA SEÑORA DE LA CONSOLACIÓN DE SUMAMPA

http://www.santuariodesumampa.org/ - Informes: contacto@santuariodesumampa.org

DESCRIPCIÓN DE LA IMAGEN

En este simulacro, la madre y el hijo toman forma en una sola masa de arcilla cocida, bajo la acción de una mano desconocida cuyo anonimato no llegará a develarse nunca. El conjunto es un poco tosco y deficiente como obra de arte, pero la impresión que su presencia sugiere redime el ignorado autor de las fallas que puedan anotarse. Brota espontáneamente en el animo de quien la mira un sentimiento de ternura, algo como una emanación intima de cosa familiar muy querida. La virgen es pequeña no mide mas de 20 centímetros de alto y esta sentada sobre una banqueta rudimentaria, que a su vez se asienta en un montículo de piedra agregado posterior.

La cara es bonita: muy amplia la frente; la nariz recta; la boca delicada; bien trazada la línea del mentón. Los siglos le han impreso un tinte pálido, medio amarillento, como de marfil viejo. El artista o mas bien el simple devoto aficionado, han logrado sin pensarlo tal vez, un acierto feliz en un detalle fácil: los ojos no han modelado nada le ha bastado una pincelada tenue, una oblea diminuta y una curva para conseguir una expresión.

Revelación de la mirada

Su mirada es serena firme sin dureza transparente y diáfana como un cristal. Por eso mira de frente y de frente con toda confianza se la mira.

La toca blanca

La Virgen de Sumampa cubre su cabeza ligeramente inclinada hacia su derecha con una toca blanca, manteleta o pañuelo grande que cae hasta poco mas abajo de los hombros.

Y esta bien así conforme a la reglas de la modestia que ajusto su vida y a su conducta la moradora silenciosa de la casita humilde de Nazaret, donde la vida se deslizaba tranquila y feliz, bajo la mirada vigilante del jefe de la familia, el patriarca San José.

La túnica y el manto

La túnica en la imagen de Sumampa es roja de un rojo oscuro, semejante acaso a la de las vírgenes de Judá, que en los días festivos debía ser de púrpura de Tiro. Un ceñidor dorado que se anidaba a la cintura. El manto es azul oscuro asimismo; da una amplia vuelta sobre las rodillas en forma de cubrir todo lo rojo y aparece sembrado con unas hojas sueltas, color oro viejo, que se juntan en grupo de a tres, como se quisieran imitar la flor de lis.

El Niño Jesús dormido

Sobre las rodillas de la Señora duerme en Niño Jesús, de pocos meses de edad, los finos labios de la madre parecen haberse pegado con la ultima estrofa de un dulce arrorro en el preciso instante tras vago cabecear dejando caer el bracito izquierdo hacia adelante. Para recostar a su hijo Maria a tendido un pañal, detalle este que por si solo sugiere un largo capitulo de vigilias, de preocupaciones y de ternuras domesticas. Porque apenas se cabe insinuar que ese pañal es obra de Maria.

Ambiente hogareño

La Virgen de Sumampa de ambiente mas humano, mas real, con mayor sentido de la vida domestica, que hemos contemplado. Difunde en torno suyo el halago de la confianza familiar, de la caricia hogareña, insinuante, acogedora. Hasta se nos ocurre postiza la corona que le asigna la sanción divina de su gloria imperecedera; mejor estaría en su lugar el rodete aquel de trapo que ella armaba sobre su cabeza para asentar el cántaro e ir en busca del agua del manantial; ese pachquil que llama las mujeres de Santiago del Estero.

Luis Bravo y Taboada "La Consolación de Sumampa"

EL SANTUARIO

BREVE RESEÑA HISTÓRICA

Un hacendado del pago de Sumampa quiso dedicar a la Virgen Santísima una capilla con este designio escribió a otro paisano suyo le mandase del Brasil un bulto o un simulacro de Nuestra Señora en el misterio del Inmaculada Concepción, para colocarla en dicha capilla que estaba fabricando. En virtud de este encargo se le remitieron desde Brasil, no una sino dos imágenes para que escogiese el que mejor le pareciese. Dicha capilla o ermita seria un humilde rancho construido con piedras, cal y barro y techo de paja. Pues la pobreza de esa región y la carencia de maquina para la construcción no daba para más.

A fines de junio de 1630 se cumple en Sumampa el gran milagro de Maria Santísima, la cual venera los presentes una imagen de nuestra Señora, pero ahí esta la maravilla: La imagen "aparecida" es del titulo de la madre de Dios con el Niño Jesús dormido entre sus brazos y no la pedida de la Inmaculada Concepción, que quiso quedarse en Luján a finales de noviembre es colocada en la capilla o ermita entonces terminada por la familia de Don Farias de Saa. Las fiestas patronales de noviembre recuerdan este hecho de la inauguración de la capilla.

En el año 1670 con la solemnidad se habré a los fieles de Maria Santísima llamado entonces Nuestra Señora de Consolación, por con la llegada la Santa Virgen trajo a estas tierras el consuelo, el gozo y la paz. En el sitio de la Capilla hay paredes de barro y cal el techo de tejereria y tejas con dos puertas de tablas, con sus herraduras dentro de ellas tres altares, el altar mayor un dosel de colchas y cielo raso verde y sobre el altar un tabernáculo de madera, todo un pintado al óleo, y dentro la imagen de Nuestra Señora de la Consolación, un sagrario y un sagrario de plata, dos campanas buenas y una quebrada. Todo el ornato de esta iglesia es dado de limosna de los que van a la romería de dicho Santuario. Es una descripción detallada del templo del Cura de Sumampa Diego de Corbalán en el año 1692.

El Santuario construido por mano de obra indígena fue refaccionado numerosas oportunidades y reconstruido por lo menos en 1782 únicamente nos consta que este año estaba arruinado y en estado de no poderse celebrar en el sino lo permitiera la necesidad y no haber otro recurso para el socorro espiritual de los fieles. Los fieles desean en gran manera la reedificación de dicho templo y ofrecen gustosos sus limosnas para ello ya por conservar la memoria de su antigüedad.

La fachada modificada en el trascurso del siglo IXX se levanta a ras con el tejado del techo que es en su totalidad de tejas, molduras muy simples que a maneras de jambas y dinteles contornean las aberturas, son reforzadas con guardapolvos curvos sobre las puertas.

El sencillo interior se compone de una sola nave de veintiséis varas y medio de largo y seis varas y media de ancho, el coro alto de tablazón y barandilla de madera, del ancho de la iglesia todo bien tratado, el altar mayor con nicho en la pared donde esta el Sagrario y arriba el nicho de madera de Nuestra Señora de la Consolación.

La agreste tierra Santiagueña conserva muy pocos restos de su pasado colonial. Un terreno suelto, salitroso y las periódicas inundaciones que tornan dificultosos mantener en buen estado las construcciones y el temblor que en 1817 derrumbo casas y templos, han hecho del Santuario del Nuestra Señora de la Consolación el único edificio en pie del periodo virreinal en toda la Provincia de Santiago del Estero.

El Santuario de Sumampa fue declarado monumento histórico Provincial por decreto acuerdo "A Nº11" del 18-VIII-1972 y declarado monumento histórico Nacional por decreto Ley Nº 1180 del 12-XI-1973, como un testimonio de alta valoración histórica, arquitectónica, religiosa y cultural.

FIESTAS PATRONALES

La mayoría de los historiadores sostienen que la imagen de Nuestra Señora llego a Sumampa hacia fines de junio del año 1.630. La Santa Imagen debió ser depositada y venerada en la casa de Antonio Farias Saá; pero tan pronto fue posible, y terminadas las obras de la pequeña capilla o ermita, se llevó allí la imagen en una ceremonia extraordinaria de fervor y concurrencia. El traslado tuvo lugar en los últimos días del mes de noviembre de ese mismo año de su llegada. Al acto del traslado no faltaría sin duda el primer cura párroco de la región Don Juan de San Miguel y Arévalo, quien al poco tiempo fijaría su sede parroquial en este paraje, junto a la Capilla de Nuestra Señora, por creerlo el sitio más conveniente como punto y centro y misión de culto y fe.

Muy pronto también la santa imagen fue venerada con el titulo de Nuestra Señora de la Consolación, bien por una tradición o devoción familiar, bien por empeño o decisión diocesana; ciertamente la Virgen con su llegada había traído a estas tierras consuelo, gozo y paz.

Seguramente data de esos primeros comienzos del culto, y recordando la entronización de la Santa imagen en la ermita, la celebración de las fiestas patronales en el mes de noviembre.

La novena patronal comienza el día 11 de noviembre y concluye el día 19; los días 20, 21 y 22 se realiza un triduo solemne preparatorio y el día de la fiesta patronal en honor a nuestra Señora de la Consolación de Sumampa es el 23 de noviembre.

2 comentarios:

  1. PONETE UN POCO DE HISTORIA JEJJEJEJE, SI NO SABEN OY LOS MATAS A TODOS JEJEJEJEJ


    JUAN

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  2. No entiendo nada ;) me pueden dar mas informacion se lo agradesco.

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